En la última fase se encuentra el proyecto de modernización de tuberías de agua potable que ejecuta Esval en la localidad de Curimón. La iniciativa, que permitirá optimizar el servicio para más de 2.500 hogares, tiene una inversión que supera los $1.100 millones.
El subgerente zonal (s) de Esval, Alejandro Romero afirma que “el objetivo de este proyecto es continuar modernizando nuestra infraestructura en la zona, para reforzar el sistema de distribución de agua potable y así garantizar la continuidad y calidad del servicio. Estamos avanzando con las obras según lo programado y en las próximas semanas pondremos en operación esta nueva red, lo que aportará al progreso de Curimón y brindará una mejor calidad de vida a miles de familias”.
La sanitaria está renovando cerca de 3 kilómetros de redes en la avenida Santiago Bueras, además de instalar 5 válvulas de sectorización, 3 grifos y efectuar la reconexión de 59 arranques domiciliarios. A la fecha, sólo resta la instalación del último tramo de tuberías, estimándose el término de las obras para fines de este mes.
En tanto, Claudio Pantoja, presidente de la Junta de Vecinos “Villa Curimón, 2ª etapa”, destacó la iniciativa. “Como toda obra, puede generar algunas incomodidades, pero finalmente es por un beneficio mayor. Se han hecho bien los trabajos, la señalética ha sido adecuada y estamos agradecidos de este proyecto, porque además de mejorar el servicio, nos permite seguir avanzando”, comentó.
Finalmente, Romero destacó la coordinación efectuada con la Municipalidad de San Felipe y el contacto permanente con la comunidad del sector, durante la ejecución del proyecto.